De pequeño a Ángel Corella sus compañeros de clase le pegaban y le tiraban piedras. Ahora le quieren echar a patadas de nuestro país. Su pasión por la danza le obligó desde el principio a pagar un alto peaje. Pese a ser uno de los mejores bailarines de la historia, Ángel ha sufrido mucho.
En Estados Unidos las grandes estrellas de Hollywood se lo rifan para verle en un espectáculo. De hecho, cuando era primer bailarín del prestigioso American Ballet de Nueva York (lo dejó en junio del año pasado para cumplir un sueño en Barcelona que se está convirtiendo en pesadilla) le reverenciaban como si fuera Dios, a duras penas podía pasear por la calle entre tanto halago y aplauso y aquí, en Barcelona, muerde el polvo. Es un ídolo con pies de barro tocado y hundido.
Nadie entendió que dejara el American Ballet después de diecisiete años de éxitos. “¿Por qué lo dejaste? Mi hija y yo íbamos a verte a escondidas al Metropolitan, a Chelsea le gustas mucho”, le preguntaba Hillary Clinton y Corella le contestaba que lo hacía porque en España tenía una escuela y quería apostar por crear una compañía.
En su último encuentro el pasado diciembre en el prestigioso Kennedy Center de Washington, tras bailar ante Obama, Hillary y Corella charlaron largo y tendido. “¿Qué tal te va con la escuela?”, le espetó la mujer del ex presidente de Estados Unidos.
“Aún espero una respuesta por parte del Liceu”En su último encuentro el pasado diciembre en el prestigioso Kennedy Center de Washington, tras bailar ante Obama, Hillary y Corella charlaron largo y tendido. “¿Qué tal te va con la escuela?”, le espetó la mujer del ex presidente de Estados Unidos.
“Pues mal. En España el arte no importa, nos han subido el iva, no hay subvenciones…”
Angel ya está cansado y desilusionado por el trato recibido en España, de hecho ya se ha planteado irse de nuevo para no volver.
Le queda poco para tirar la toalla. Pero en Estados Unidos se lo agradecerán. Allí goza de la admiración y el respeto de figuras de talla internacional.
Una pena que España no sepa apreciarlo, ya que está perdiendo a uno de los mejores artistas de ballet del mundo.